En los últimos días la Policía Federal impidió el paso a por lo menos 200 haitianos que intentaban ingresar en Brasil por la frontera peruana, en la provincia de Acre, en la Amazonia. Y cada día se suman a ellos entre 70 y 80 más, que hicieron un largo, caro y peligroso viaje partiendo de Haití hacia la República Dominicana, luego pasando por Panamá y Perú, para entonces intentar el cruce de la frontera. En Brasil les esperan ofertas seguras de empleo y, por encima de todo, sueño y esperanza. Escapan de un país destrozado, arruinado y miserable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario